Vean lo que dijo pa defenderse este seudo investigador que se dedica a copiar estudios y a venderlos como si fueran propios:
Amigos(as) y colegas:
Posiblemente ya están enterados de las acusaciones y calumnias contra mi y otros profesores y autoridades de la UASLP, que fueron publicadas en unartículo de opinión de La Jornada (edición nacional) el sábado 21 deagosto, firmado por un investigador de otra institución académica ubicada enSLP. Este libelo se sumó a varias agresiones que habíamos recibido en lasúltimas semanas, por email e internet en forma anónima, así como ainsinuaciones e infamias que se ha aparecido en algunos medios impresos. Hasido muy decepcionante ver cómo se han expandido por Internet en variosespacios, sin mayor reflexión y crítica sobre la falta de evidencias con quese formulan.
Para hacer uso de mi derecho de réplica, solicité la difusión del texto queles copio abajo, a la Sra. Carmen Lira Saade, Directora General de LaJornada. También Fernando Díaz Barriga, profesor de la Facultad de laMedicina ha hecho lo propio. Anexo las versiones en pdf de ambos documentos,que fueron publicados aquí:
http://ambiental.uaslp.mx/Agenda/ReplicaMedellin.asp
http://ambiental.uaslp.mx/Agenda/ReplicaDiaz.asp
Saludos cordiales:
Pedro Medellín Milán
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La Universidad Autónoma de San Luis Potosí: Principios universitarios para diferir y convivir
Dr. Pedro Medellín Milán Profesor Investigador y Coordinador de la Agenda Ambiental de la UASLP San Luis Potosí, SLP, 23 de agosto de 2010.
Texto de réplica cuya difusión fue solicitada por el autor a la Sra. Carmen Lira Saade, Directora General del periódico La Jornada, mediante una nota y un enlace web. http://ambiental.uaslp.mx/Agenda/ReplicaMedellin.asp
El principio de libre examen y discusión de las ideas es uno de los ejes dela cultura académica universitaria. Nos permite diferir y al mismo convivir.Nos permite crecer en la diversidad y pluralidad. Ningún universitariopensaría en dirimir sus diferencias de punto de vista con sus colegas através de acusaciones en medios masivos de comunicación, sin antes abrir unespacio de diálogo y comunicación con sus pares. Tampoco se alzaría comojuez acusador de pretendidas deshonestidades y colusiones, sin más argumentoque las sospechas y fantasías que construye alrededor de informaciónfragmentada y distorsionada, tal como lo hizo Juan Carlos Ruiz Guadalajaraen La Jornada el pasado sábado 21 de agosto.
Es verdad que la ciencia y la tecnología no resuelven todos los problemasambientales, como también es verdad que los universitarios reconocemos estaslimitaciones sin por ello desvirtuar nuestra contribución como académicos ycomo ciudadanos, ni el papel del conocimiento, la enseñanza y lainvestigación. Para muchas cosas la ciencia actual sigue siendo unaherramienta útil que debe utilizarse en forma crítica, pues tieneimportantes alcances pero taR>En este contexto, la Universidad Autónoma de San Luis Potosí se hadistinguido por su enfoque eminentemente social. En particular las áreas quese han dedicado a los temas ambientales, trabajan arduamente para cumplirmejor su misión de servir a la sociedad. Cabe recordar que en 2006, graciasa los esfuerzos realizados por toda la institución, la UASLP fue la primerauniversidad del país en obtener el Premio al Mérito Ecológico.
La Universidad realiza incontables investigaciones, estudios y aportacionessociales de diverso tipo, para resolver la problemática ambiental de laregión y para abordar sus orígenes desde el punto de vista técnico, social,económico y/o política. Existen muchas muestras de trabajo con un enfoquecomunitario y emancipador. Esto se logra trabajando con y para la gente delas comunidades urbanas y rurales, para mejorar la calidad de suscondiciones de vida y del ambiente. Además se busca generar información,análisis y crítica que ayude a tomar decisiones informadas sobre gestiónpública y construir prácticas sustentables de producción en la ciudad y enel campo.
Esto último fue lo que hicimos en 1998 en el caso del Proyecto Cerro de SanPedro de Minera San Xavier (MSX), a petición del Gobernador del Estado deSan Luis Potosí, quien nos pidió a varios investigadores analizarconcienzudamente la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) presentada porla empresa a la Semarnat. Aceptamos porque lo consideramos parte de nuestraresponsabilidad social y porque la gestión ambiental pública no solía tomardecisiones bien informadas en asuntos tan complejos, que frecuentemente setomaban a la ligera y con criterios preponderantemente economicistas. Elreporte, que se generó sin pagos de ninguna especie, se encuentra publicadodesde entonces en el sitio web de la Agenda Ambiental de la UASLP:http://ambiental.uaslp.mx/docs/reportes.asp
Sabíamos que nuestros esfuerzos no corregirían todos los errores del sistemapara estos casos, pero confiamos en que se podrían lograr dos cosasimportantes: obligar a un proceso informado y, en caso de que a pesar de esose autorizara su operación, facilitar un mayor control sobre las actividadesde la empresa. Sin embargo, hay que recordar por lo menos dos puntos queaclaramos desde que publicamos el análisis de la MIA: 1) Nuestro propioenfoque estaba limitado a los efectos ambientales, tal como se nos pidió ypor más que advertimos que debían tomarse en cuenta otros factores desustentabilidad, y 2) como era obvio, nosotros no tomábamos decisiones sobrela autorización de la operación. No somos autoridades, sino investigadores.Por su parte, el gobernador pretendía informarse e incidir en la decisión delas autoridades federales legalmente competentes en el caso.
Una vez que la Semarnat autorizó a la empresa, el gobernador constituyó unComité de Seguimiento con el propósito de vigilar y supervisar la operaciónde MSX. Varios investigadores recibimos una invitación para participar endicho Comité y aceptamos a título personal, no como representantes de laUASLP. Por mi parte sopesé los pros y contras. Acepté bajo la premisa deque, si la empresa iba a operar, la sociedad potosina merecía que noscomprometiéramos a verificar que su funcionamiento cumpliera todas lasnormas y compromisos requeridos. Por esta razón, se logró que todas lasoperaciones estuvieran sujetas a escrutinio a través de un auditor externocontratado ex profeso y que entregaba informes al propio Comité. Sinembargo, el funcionamiento del comité tuvo vicisitudes, derivadas de laanulación de la autorización original, de su renovación varios años después,así como de la inconformidad social existente. Varios investigadores de laUASLP, incluido yo mismo, abandonamos el Comité hace varios años, por faltade condiciones apropiadas para operar, pues el Gobierno del Estado nocumplía la función de liderazgo necesario, particularmente en cuanto aaclarar la situación jurídica de la empresa a la que estábamos supervisandocomo ciudadanos. Tampoco en esta actividad hubo remuneración o vínculoeconómico alguno de mi parte con la empresa MSX o CEASSA, ni lo ha habidodurante todos estos años.
Ruiz Guadalajara llena de sospechas las lagunas que deja su desconocimientode la UASLP, sus principios, sus programas y su normativa. Señala en sutexto que la creación de la Agenda Ambiental fue el origen de un grupo decientíficos deshonestos implicados en negocios lucrativos e ilegales y meacusa, junto con otros compañero(as) profesores y autoridades de laUniversidad, de formar parte de una red que genera gananciasextrauniversitarias. Palabras como ilegalidad, corrupción y delincuenciasalpican su texto. Nos acusa de aprovecharnos de la infraestructurauniversitaria bajo argumentos falaces y ambiciones ilegítimas, para serviral cliente. Sin ofrecer prueba o evidencia alguna, sino informacióndistorsionada a su gusto, nos acusa públicamente e ignora décadas de trabajohonesto, de logros sociales y de proyectos trascendentes por los que lasociedad potosina nos reconoce. No lo piensa dos veces antes de generalizare intentar desprestigiar a la Universidad y el trabajo de los profesores yestudiantes, así como a la Agenda Ambiental en particular.
En 2004 asumí la Coordinación de la Agenda Ambiental de la UASLP, unaoficina encargada de trabajar transversalmente con las entidades académicasde la institución para promover la incorporación de la perspectiva ambientaly de sustentabilidad en su quehacer de docencia, investigación, extensión ygestión. Con un pequeño equipo humano, la Agenda Ambiental colabora con laambientalización de los programas educativos de la institución y organizaequipos multidisciplinarios de investigadores para trabajar proyectos dediversa índole con todo tipo de actores y sectores e la sociedad:comunidades, gobierno, empresas, medios masivos, entre otros. Algunosejemplos de estos proyectos participativos son el Plan Estatal de DesarrolloUrbano 2000-2020; el inventario de reservas territoriales urbanas en sieteciudades de varios estados del país; el Inventario de Emisiones de la ZonaIndustrial de la ciudad; el Ordenamiento Ecológico del Territorio del Estadode SLP; varios Planes de Manejo de Áreas Naturales Protegidas; un Atlas deRiesgos para Cd Valles; y dos ordenamientos territoriales para comunidadesindígenas (Pokchich y El mai) de la Huasteca, así como otros proyectos congrupos de la sociedad civil.
La Agenda Ambiental apoya el funcionamiento del Programa Multidisciplinarioen Ciencias Ambientales, en sus modalidades nacional e internacional.También opera el Sistema de Manejo Ambiental de la UASLP. Además organizaconstantemente cursos de actualización en asuntos ambientales y ofrecediplomados presenciales en diversos temas, así como un diplomado virtual eneducación ambiental y para la sostenibilidad. También ha mantenido desde sufundación una política de comunicación con la sociedad a través depublicaciones en medios masivos y listas de correo electrónico. Además hapromovido la difusión de cientos de textos de divulgación y materialesdidácticos. En sitio web http://ambiental.uaslp.mx, activo desde hace 12años, contiene un registro de todas estas iniciativas y logros.
Por su enfoque multidisciplinario, plural y transversal, así como por losproductos y logros que ha tenido a lo largo de los años gracias a lacomunidad académica de la UASLP, la Agenda Ambiental se ha ganado elreconocimiento como una iniciativa innovadora en las instituciones deeducación superior mexicanas. Es fundadora del Consorcio Mexicano deProgramas Ambientales Universitarios para el Desarrollo Sustentable(Complexus), y aparece en varios documentos internacionales como un ejemplode buenas prácticas. El Rector Mario García Valdez se preocupa y apoya lasacciones para que todo esto sea posible.
La Agenda Ambiental promueve y colabora en este tipo de acciones conprofesores, cuerpos académicos, programas y entidades de la Universidad quemantienen su propia capacidad de gestión, pero no las norma ni vigila. Laclave de nuestro trabajo es la colaboración voluntaria, el trabajo enequipo, la tolerancia, el respeto y la pluralidad.
Todos los proyectos y programas se manejan conforme a la normativainstitucional de posgrado, educación continua, personal académico, ingresosextraordinarios, etc. y la mayoría han sido objetos de evaluacionesexternas, revisiones y auditorías, como el resto de la UASLP que viveinmersa en una cultura de rendición de cuentas. Las prácticas punibles en lainstitución son afortunadamente excepcionales y difícilmente quedan sinsanción, pues todos los procesos están sujetos a informes detalladosfrecuentes y a mecanismos de transparencia.
El espíritu universitario da cabida a la diversidad y a la innovación.Además de la Agenda Ambiental, en la UASLP se dan otras iniciativas, comolas lideradas por los doctores Fernando Díaz Barriga (salud ambiental) yMarcos Monroy Fernández (CEASSA) o como el Centro Universitario de ApoyoTecnológico Empresarial, entre muchos otros. Sus enfoques también pueden serdiferentes, bajo los principios de libertad de investigación y de libreexamen y discusión de las ideas. Nadie trata de imponer a otros su propiavisión ni se parte de la premisa de que quienes piensan diferente sonindignos, corruptos, deshonestos o poco éticos. La tolerancia y el respetoson parte del espíritu universitario y todos tenemos derecho a disentir.Como universitarios, podemos estar equivocados y podemos tener divergenciasen nuestros puntos de vista, pero contamos con mecanismos para cuestionar,criticar, debatir, discutir, aprender y corregir, en el marco de los másaltos principios universitarios y de lo que exige la ética, el servicio a lasociedad y el cumplimiento de nuestra normativa. Yo diría que la granmayoría de los universitarios de la UASLP estamos orgullosos de nuestrainstitución y seguimos estos principios.
Por todo lo anterior me ha resultado inexplicable la serie de acusaciones deque hemos sido objeto varios compañeros(as) en las últimas semanas pordiversas vías, incluyendo libelos y amenazas anónimas en Internet, que yahemos documentado y que están siendo investigadas. En estas calumnias sesuele mezclar, manipular, confundir y tergiversar información parcial, paraimprimirle un sesgo e intención difamatoria cuyos objetivos todavíadesconozco. En lo personal, aunque no debería ser necesario por latrayectoria que he construido a lo largo de más de treinta años de servicioa la Universidad y a la sociedad, y de la honestidad con que me he conducidoen toda mi vida, manifiesto que en mi relación con MSX, con cualquier otraempresa o el gobierno, o con mis compañeros(as) universitarios(as), noexiste nada reprobable desde el punto de vista ético o legal. Aceptaríadiscutir si me he equivocado o no, pero no acepto que por ello se cuestionemi probidad. En este contexto, en particular considero las acusaciones deJuan Carlos Ruiz Guadalajara como un agravio personal, profesional,académico e institucional. Por ello me reservo el derecho de dar cauce legala sus difamaciones o a las de cualquier otra persona que lance acusacionessin pruebas ni fundamento, en el momento que lo considere necesario.
Tengo esperanzas de que el trabajo realizado a lo largo de décadas y lasevidencias que existen de ello, permitirán que la comunidad académica y lasociedad en general sepan discernir con claridad entre la verdad y lacalumnia, porque es la única forma que tenemos los universitarios de mostrarnuestra responsabilidad y nuestro compromiso.
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UASLP: MEDIO AMBIENTE Y RESPONSABILIDAD SOCIAL
Dr. Fernando Díaz-Barriga(Profesor investigador de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí)
Texto de réplica cuya difusión fue solicitada por el autor a laSra. Carmen Lira Saade, Directora del periódico La Jornada,mediante una nota y un enlace web.http://ambiental.uaslp.mx/Agenda/ReplicaDiaz.asp
En pleno ejercicio de mi derecho de réplica, he solicitado a La Jornada queme otorgue mismo espacio que se le brindó al Dr. Juan Carlos RuizGuadalajara, quien el sábado anterior señaló, y cito textualmente, que “laUASLP es la muestra de cómo sectores de instituciones públicas deinvestigación científica de nuestro país se han alejado de su función socialpara convertirse en consultorías de negocios privados, todo bajo la lógicadel lucro y de un desarrollismo insostenible que necesita de un tipoespecífico de ciencia, la mercenaria, para justificar sus atrocidades”.
Como miembro de la sociedad civil, el Dr. Ruiz puede utilizar los medios decomunicación para decir lo que él crea, siempre y cuando no atente contralos derechos de los demás. El hecho de que algunos de nosotros nocompartamos sus estrategias de lucha no significa que estemos equivocados ymucho menos que seamos deshonestos. Sus diferencias con nuestras formas depensar no deberían dar pie a la intolerancia y al señalamiento difamatoriocontra las personas o contra la Universidad.
Ni ciencia mercenaria ni negocio privado. El Dr. Ruiz olvida que launiversidad pública se debe a todos los sectores de la sociedad, sinsectarismos ni consignas. La UASLP ha dado pruebas de su compromiso socialen muy diversos temas y asuntos, no sólo en el ambiental.
Estamos de acuerdo que el quehacer universitario en todo el país debe serevaluado, y puede ser criticado, pero siempre utilizando argumentos válidosy evidencias. Señala el investigador de El Colegio de San Luis, que la UASLPse ha alejado de su función social y critica sobre todo, el comportamientode nuestra Institución en el área ambiental. Plantea sus afirmacionesutilizando como escudo reflexiones generales sobre la ciencia y la sociedadcon las que incluso podemos coincidir, pero no brinda fundamento algunosobre la relación de estos conceptos con el caso concreto que analiza. Éstaes una clara muestra de falta de rigor académico, pero también de falta deética, ya que de manera inexplicable por tratarse de un académico,intencionalmente o no, termina sumándose a una campaña de desprestigio eintimidación en contra mía y de varios colegas universitarios que no haescatimado medios: amenazas y anónimos por correo electrónico, en internet eimpresos. Una campaña plagada de tergiversaciones y calumnias, sin aportaruna sola prueba.
En áreas con conflicto ambiental, la credibilidad es base para la acción ¿Enque reside la credibilidad de la UASLP? En una trayectoria de más de 30 añosde formación de profesionistas y posgraduados, investigación, vinculación ylucha en materia ambiental en el Estado de San Luis Potosí y a nivelnacional. La UASLP cuenta con más de diez cuerpos académicos orientados atemáticas ambientales, con más de cincuenta líneas y más de cien proyectosde investigación. Un grupo comprometido de por lo menos 75 profesores einvestigadores, sin contar más de cien estudiantes de posgrado, trabajandoen distintas vertientes relacionadas con el medio ambiente y sus componentessociales, económicos y políticos. Todos con el ideal de que los esfuerzosrealizados sirvan para transformar el mundo actual y construir en otrostiempos próximos, una sociedad sostenible.
Siendo el Dr. Ruiz profesor del Colegio de San Luis y dado su doctorado enciencias sociales, me resultó decepcionante el análisis tan superficial desu escrito. El centro de su señalamiento es el caso de Minera San Xavier.Alrededor de este caso hace varias acusaciones sobre el comportamientoprofesional de varios investigadores (incluyéndome) y por lo tanto, explicobrevemente lo hecho por la Universidad en este conflicto (todo esto se puedeconstatar en los informes publicados en el Portal de la Universidad:<http://www.uaslp.mx> www.uaslp.mx y en forma impresa a lo largo de décadas,así como en numerosas publicaciones académicas y de divulgación social).
En 1998, el Gobierno del Estado de San Luis Potosí pidió a la UASLP queintegrara una comisión para analizar la manifestación de impacto ambientalpresentada por dicha empresa. Después de varios meses de trabajo de unacomisión multidisciplinaria, la UASLP respondió con un reporte en extensoque se publicó inmediatamente en Internet en la dirección:<http://ambiental.uaslp.mx/docs/reportes.asp>http://ambiental.uaslp.mx/docs/reportes.asp . Ahí sigue publicado desde haceya casi doce años. Este reporte incluyó también un resumen ejecutivo con másde noventa observaciones. Además, en el mismo documento, la comisión señalóentre otras cosas lo siguiente:
"La Comisión considera sumamente importante dejar claramente establecido queen este caso existen dos posibilidades para la toma de decisiones: que seniegue o que se otorgue la autorización del proyecto a MSX. (...) Es decir,la autoridad puede basarse en la presente opinión para establecer lostérminos de la autorización del proyecto, en su caso, o para justificar lanegativa emitida a la empresa. En cualquier caso debe quedar claro que laUASLP no reconoce ninguna responsabilidad legal, toda vez que ésta es unaopinión técnico-científica solicitada por la autoridad estatal y llevada acabo en forma voluntaria, gratuita, sin intereses particulares a favor o encontra del proyecto, y con reconocimiento explícito de las limitaciones y delos alcances con que se formula"
Posteriormente, la Semarnat autorizó la manifestación de impacto ambientalimponiendo 90 condicionantes. Sin embargo, esta autorización se anuló añosdespués, razón por la cual la empresa finalmente comenzó sus operacioneshasta 2007. Durante varios años y hasta mediados de 2008, participé a títulopersonal (no institucional) en una comisión de seguimiento liderada por laSecretaría de Ecología y Gestión Ambiental del Gobierno de Estado, encargadade supervisar que la empresa cumpliera los compromisos adquiridos, ainvitación expresa de las autoridades estatales, sin recibir remuneración ysin privar ningún interés ilegítimo. Me alejé de la Comisión por que ésta noquiso nunca entrar al debate de los aspectos legales de Minera San Xavier,los cuales estaban (y están) siendo cuestionados por algunos sectores de lasociedad.
¿La participación de universitarios en esta Comisión es condenable,solamente porque otros no estuvieron de acuerdo con ella? ¿Cómo puede unamente académica ignorar todos los antecedentes? ¿Tiene ética aquél académicoque utiliza información parcial para llegar a las conclusiones que leconvienen a sus intereses? Veamos mas antecedentes de los que hemos sidocondenados, solamente por diferir.
Siempre en colaboración estrecha con otros investigadores y estudiantes dela UASLP, llevamos 25 años en contra de la contaminación surgida de laindustria minera. Nuestros trabajos en apoyo a comunidades en conflictoambiental iniciaron desde 1988 con los estudios en la zona metalúrgica queIndustrial Minera México tiene instalada al poniente de la Ciudad San LuisPotosí. Las investigaciones en dicha zona no sólo permitieron lapavimentación de todo el Sector Morales y Pirules, sino que eventualmentellevaron a una reducción hasta valores normales de la exposición infantil alarsénico. Ahora, los estudios continúan a fin de vigilar la limpieza de laplanta de cobre durante su cierre. Las luchas no son coyunturales, debenmantenerse a través de los años a fin de que nadie olvide los malos pasosdados.
Pero en lo referente a la industria minera, las investigaciones van másallá. Hemos trabajado en Villa de la Paz, Cedral, Ciudad Juárez (metalúrgicade ASARCO ubicada en El Paso, Texas), Chihuahua alrededor de Avalos unaex-fundición de plomo; y en dos municipios mineros de Zacatecas. Inclusivese han logrado victorias civiles en Argentina, que han disminuido el riesgopor plomo en dos comunidades marginadas.
¿Que a la UASLP le falta compromiso social? Las investigaciones en áreas deconflicto ambiental se han ampliado al Río Santiago en el Estado de Jalisco;al Río Coatzacoalcos alrededor de los complejos petroquímicos de PEMEX; avarios municipios indígenas de Chiapas, Oaxaca y Quintana Roo; a comunidadesartesanales en Tlaxcala; a los campos de plaguicidas en San Luis Potosí yChiapas; al manejo de químicos electrónicos en Ciudad Juárez; y a laevaluación del riesgo residual por DDT en Mesoamérica (incluyendo todos lospaíses de Centroamérica excepto Belice). Los problemas son enormes pero elcompromiso con la sociedad también lo es.
Compromiso social mostrado también con las investigaciones que definieronque el flúor es un elemento neurotóxico particularmente peligroso para lapoblación infantil y se alcanzó tal éxito, que por mucho tiempo encolaboración con la Secretaría de Salud del Estado y de la COFEPRIS a nivelnacional, en SLP fueron aplicadas normas mas estrictas que lasinternacionales en materia de calidad de agua potable. Ahoradesgraciadamente existe un amparo que ha impedido que nuestrasinvestigaciones se transformen en un esquema nacional de protección a lasalud infantil. Igual que en otros casos, no pararemos. En cuestiones desalud pública no puede aceptarse un no.
Compromiso social que se expresa en comunidades indígenas. Así,investigadores de la UASLP junto con autoridades estatales y federales,lograron la protección ambiental de la tierra sagrada de los Wixaritari.Además, en la Huasteca Centro establecimos con SEDESOL una estrategia dedesarrollo social integral, multidisciplinaria y totalmente participativapara lograr una Huasteca sin Humo; ahora, cientos de viviendas indígenas hansido liberadas del humo de leña. Un segundo esfuerzo en la zona trabajaráaspectos de educación comunitaria; de cosecha de agua; de manejo de residuossólidos (incluyendo los electrónicos); de seguridad alimentaria; ybuscaremos establecer tópicos tan novedosos como el de la toxicologíaclínica comunitaria como base para la prevención del alcoholismoadolescente. En la Huasteca Sur se trabaja en la protección de los niñosexpuestos a contaminantes dado que uno de los ríos acarrea en sussedimentos, concentraciones inmensas de manganeso proveniente deexplotaciones mineras en el vecino Estado de Hidalgo.
Todas estas investigaciones motivan además otros hechos, como el de laformación de recursos humanos y la formación de cuerpos académicos en Méxicoy América Latina. Bajo este contexto, en la Universidad fue generada unapropuesta totalmente novedosa y por lo tanto inédita en el país en materiade educación superior, la licenciatura en Ciencias Ambientales y Salud,programa enfocado precisamente a los municipios marginados, a esa ÁfricaMexicana que tanto duele a todos.
Nos enfrentamos a la marginación y a la vulnerabilidad en todos los espaciosy con todas las propuestas académicas a nuestro alcance. Hemos visto latristeza y la desesperación en muchos rostros de nuestro pueblo, perotambién la sonrisa y el empuje de los jóvenes en Morales o en los hijos ylas madres del programa de mujeres arcoíris que tenemos en la Huasteca y enla Tercera Chica (ladrilleras) de la Ciudad de San Luis Potosí. La lucha espor México, incluyendo la lucha contra las mineras que no justifican enbeneficios los riesgos que dejan en las comunidades. Lucha que por ciertobien comprendió la siempre querida Beatriz Septién, una de las primerasvoces en contra de MSX, en aquellas hermosas tardes cuando debatíamos sobrela toxicidad del cianuro o los riesgos del mercurio. Ella comprendióentonces, cómo diferentes caminos pueden llevar al mismo fin; ahora contanta intolerancia e insuficiente análisis, cuanto extraño sus formas tanhonestas. Nunca buscó los reflectores atacando a los demás sin argumentos nipruebas. Prefirió trabajar.
Así que me he detenido a contestar, porque cuando otros apenas pensaban ensu desarrollo personal, nosotros ya estábamos mano con mano trabajando enambientes vulnerados. Por cierto, todo este trabajo no podría haberselogrado sin la participación de muchos colegas universitarios, entre los quese encuentran los ahora sentenciados por las sospechas personales del Dr.Ruiz disfrazadas de argumentos académicos.
Respeto su participación activa en el Frente Amplio Opositor a Minera SanXavier, pero no entiendo el que busque erigirse como juez. La obligacióncivil del Dr. Ruiz, si tiene fundamentos de lo que afirma, es aportar laspruebas y dar cauce legal a sus acusaciones, en cuyo caso aportaremos laspruebas que sí tenemos y defenderemos nuestro prestigio y el de laInstitución. Por mi parte, jamás cometería el mismo error del Dr. Ruiz, deutilizar mis diferencias de enfoque y estrategia con él, como un pretextopara lesionar una comunidad académica que respeto: la de El Colegio de SanLuis.
Pertenezco a la UASLP con orgullo. Es una Universidad Pública con sólidocompromiso y presencia social en todos los campos, no sólo el ambiental. Esuna institución que ha dado muestras de su capacidad de rendir cuentas a lasociedad, de asumir la evaluación externa y de involucrar a la sociedad ensus procesos académicos. Nadie me quitará el enorme placer delreconocimiento de nuestra gente, de ese que nos indica una sola cosa: vamosbien. Y si esto no es compromiso, que sean los rostros y las voces de lossiempre marginados quienes así nos lo señalen, que sabremos corregir la rutapara que las comunidades tengan investigadores dignos de ellas.
San Luis Potosí, SLP, 23 de agosto de 2010
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